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Después de 3 años, el propósito de esta bitácora es básicamente describir lo que se observa en el comportamiento de los dedos y la mano sin juzgar en absoluto cuanto parecido guarda este o no con lo que tradicionalmente espera un guitarrista experto o profesional.

Así mismo, de manera paralela, se describirán algunas emociones del día y otras que acompañen al proceso de experimentación con el instrumento. Por el momento no se buscará establecer ninguna relación entre ambas situaciones; el propósito de este blog es solo observatorio y descriptivo.



Friday, January 24, 2014

Para No Olvidar

Este post es para no volver a perder de vista NUNCA, el objetivo unico de los ejercicios.
No tiene ningún sentido pasar horas sufriendo con la guitarra si lo unico en lo que se piensa es en lo que NO se quiere que suceda, en lugar de dedicarse justamente a lo que se quiere hacer.

El movimiento que se busca es muy simple , elemental, para todo humano que no tenga algún  problema fisico.

Este movimiento nunca necesitó  pensarse, mucho menos analizarse. Por lo tanto, incluso el nombre de este blogg es un error de concepción. Como lo es pensar en la mecánica del movimiento antes o mientras se toca, más aún lo es pensar en que podría salir mal.

Pensar o decir "no hagas tal cosa o aquella" no es una instrucción . Una instrucción es decir " haz tal cosa", y cuanto mas simple, mejor; mas facil de seguir. ESO, hagamos con la mano : "haz esto y solo esto" , nada mas, no hay mayor análisis que hacer.
"Esto" ( movamos los dos dedos en el aire libremente), es solo "esto" ni mas  ni menos.

Recordemos el proverbio zen del maestro preguntando a sus discípulos que ven cuando miran la luna. Uno ve el amor,  otro queso , el otro filosofa sobre los ciclos de la vida. El maestro dice " yo veo la luna". Nada mas. Zen

Hagamos caso solo a la instrucción, unica , simple, elemental; pero sin temor a equivocarnos, sin miedo. Si no se le da a las cuerdas o pasa cualquiera cosa, se repite, sin malestar, con alegria,con total relajación. Como los niños, sin frustrarse, como un juego , libre. Simple

Thursday, August 1, 2013

Frustración

Es fácil distraerse cuando uno repite indefinidamente la misma fórmula. Probablemente cuanto mas se simplifique la mirada que tenemos sobre el movimiento anticipativo, mas difícil es identificar el momento en el que empezamos a ceder a la tentación de controlar el movimiento. Vale decir, es posible que mientras mas libremente encaremos la práctica, mas difícil sea identificar los intentos (conscientes e inconscientes) por controlar dicha libertad. Empezamos a vernos seducidos por los eventuales aciertos (buena ejecución musical) y tratamos de repetir el evento. El resultado, es volver a ceder a la tensión y probablemente volver a niveles de frustración innecesarios, ya probadamente contraproducentes.
Parece recomendable hacer ciertas pausas. Llevar la práctica en cortos intervalos y descansar , para mantener o retomar la perspectiva. Ya está por demás probado que repetir obsesivamente cualquier movimiento no es solo inútil, si no negativo pues produce un retroceso en el avance. Hay que tomar distancia , descansar, retomar la perspectiva correcta y recordar el movimiento (sentirlo, dibujarlo en la mente) y realizarlo sobre el instrumento sin ninguna expectativa en particular.

Así como es lo mejor aceptar el movimiento distónico tal como es , sin forzar la mano a lograr "tocar" el instrumento "correctamente"; tal vez sea también lo mas adecuado aceptar el malestar emocional cuando uno siente que no avanza. Aceptarlo para dejarlo ir y que no nos gobierne, que no afecte nuestras vidas. Para recordarnos que seguimos aprendiendo, aprendiendo cosas que probablemente no sabemos qué son aun.
Recordar que la frustración no debería existir, pues no existen expectativas.

Thursday, July 4, 2013

Vencer las Resistencias

Es como el temor al cambio. Uno cree haber entendido y cree no estar intentando controlar la tensión. Pero el fenómeno distónico es complejo pues viene de una mente compleja que sobre elaboró una función natural del cuerpo.

Apenas uno ve un resultado favorable, uno tiende a intentar controlar de nuevo. Muchas veces no se da cuenta, pues todo parece fluir bastante bien (por buen camino, digamos). Ese es el momento de cuestionarse y Sentir si uno puede "soltarse aun mas"; si es asi - entonces hacerlo sin ningún temor a retroceder o malograr lo logrado. Seguramente volverá cierta imprecisión, pero se ganará libertad.

Solo así avanzamos, pues de lo contrario seguimos con el resultado anterior indefinidamente; que, aunque auspicioso , nos vuelve a estancar en el problema y probablemente con los días nos haga perder persepectiva nuevamente.

Dejar el Problema a un lado

no pensar en el asunto mas que en el momento de la práctica dirigida a superarlo.
Evitar de una vez por todas el estar "practicando" sin el instrumento, mientras e hace o se piensa en otra cosa, mientras no se está concentrado positivamente en el asunto.

Pensar en un problema todo el día, aunque uno crea que lo hace de buen ánimo, sólo lo hace mas pesado, mas enraizado.

Hay que vivir, olvidarse de la mano mientras uno hace otras cosas y disfrutarlas. En todo caso, disfrutar de la música también, ver otra gente tocando es solo una prueba mas de que estos movimiento son absolutamente naturales para el cuerpo humano; y cuanto mas naturales recordemos que son, menos miedo tendremos de hacerlos nosotros mismos.
Así se va yendo ese pánico (por mas pequeño que sea) en ese momento justo antes de empezar a mover los dedos cuando estamos cerca de la cuerda y todo se siente mas natural.

Friday, June 21, 2013

Cero Expectativas

Reducir a cero las expectativas. Podría parecer ilusorio, pero la sensación de lograrlo ( o por lo menos de que parezca haberlo logrado), es magnífica; tiene todo que ver con la sensación de libertad.

Finalmente, uno no retoma el instrumento cada vez (no debería en todo caso) esperando sentirse bien porque mágicamente el problema distónico va a haber desaparecido; no debemos asignarle esa carga de responsabilidad a la práctica del proceso . Hay que acerarse al instrumento sin ninguna expectativa, solo  imaginar el movimiento (dibujarlo en la mente) y llevarlo a cabo; sin juzgarlo, sin sentirse mal , defraudado o tenso si no resulta eficiente musicalmente.

La sensación de libertad o bienestar vendrá sola , como subproducto de la práctica bien hecha, bien dirigida; o sea, teniendo en cuenta lo anterior. No al revés. No podemos pensar que nuestro bienestar depende de un buen resultado con el instrumento, es asignarle al asunto una importancia y una atención excesiva; que redunda en exigencia, en expectativa, en tensión : la raíz del  problema. O sea, un círculo vicioso perfecto.

Cuando aprendemos a tocar un instrumento, es generalmente de manera progresiva - vamos conquistando metas de a pocos. Cada vez que logramos tocar bien una pieza  o un ejercicio, hemos aprendido algo nuevo, y somos un  poco mejores técnicamente, mas hábiles. Esto , generalmente produce una sensación de satisfacción y a la vez la motivación de seguir aprendiendo. Disfrutamos tocar y aprender, nuestro cerebro está hecho así : diseñado para asumir retos y superarlos. Es natural.

Cuando trabajamos para deshacernos del síndrome distónico, por lo contrario, no debemos asumir cada combinación de dedos o cada movimiento como un ejercicio, como una meta en si mismo. No son pasos progresivos para mejorar una técnica puesto que el objetivo (así como el problema) no es Técnico, es Emocional. Este objetivo, por lo tanto es solo uno : perder la expectativa y ser  un mero observador, no juzgar en absoluto el resultado.

Después de años de estar acostumbrado a lograr metas técnicas, con ejercicios progresivos esto resulta  obviamente complicado. No importa qué toquemos, qué combinación de dedos; el problema es emocional y es solo uno : el miedo a no darle a la cuerda. Por eso el dedo, o  se anticipa, o intenta asegurarse aferrándose a cualquier cuerda o parte del  instrumento. En cada formula o combinación de dedos tendrá apariencias distintas, pero que eso no nos engañe. El objetivo en la práctica es solo uno, perder la expectativa de algún resultado en particular, solo dejar ser.

Cuanto mas entendamos esto, mas cerca estaremos de la verdad, de la libertad. Lo demás viene solo.

Thursday, May 16, 2013

Sin miedo

Con menor tensión / atención, se ´puede realizar el ejercicio (indice- medio-indice-medio, etc.) de manera lenta y casi sin miedo (sin rigidez). Se observa entonces, como la raíz del problema parece radicar en el "temor" a no golpear la cuerda (cualquiera que sea) con el dedo medio; es a partir de esto que el dedo no se estira lo suficiente como para preparase para el ataque, y/o en caso de hacerlo , se dobla mas de lo debido.

Todo esto, reitero , se evidencia como reflejo de un temor grabado en la memoria emotiva. Esto , a su vez confirma que la solución al problema es también emotiva; y radica en dejar fluir los dedos sin pensar en absoluto en la posibilidad del error. Mientras uno enfrenta , el miedo (no haciéndole caso),el  movimiento fluye y el cuerpo parece recordar el movimiento original (normal).

Trabajar en esto estando muy cansado o saturado por largos minutos de ejercicio (mas de una hora) es contraproducente, uno pierde perspectiva y puede hasta deshacer lo logrado ese dia. Lo ideal es terminar siempre cada sesión con el movimiento libre y desinteresado, sin intentar asegurar nada ni pensar demasiado en si ese dia uno pudo tocar "mejor" o "peor"  pues son estas consideraciones técnicas; y el problema ( y su solución) son emocionales. Esto además, crearía expectativas para la siguiente sesión, y esto como ya hemos observado, es muy negativo

Thursday, May 2, 2013

El movimiento puro

Cuestionarse constantemente si uno está haciendo solamente el movimiento puro. No dejarse llevar por la apariencia de los resultados si no, por la total consciencia de que uno está pensando el movimiento tal como se piensa en ausencia del problema.
Si uno pretende repetir un resultado positivo, cae en el error de acostumbrarse a eso y pierde de vista la idea original. Peor aún se generan expectativas nuevamente, sobre las cuerdas , sobre la apariencia del movimiento; no sobre su sensación